Naciones Unidas dio a conocer este miércoles un Plan de Respuesta Global Humanitaria concebido para analizar y responder a las consecuencias directas de salud pública, y las indirectas humanitarias inmediatas, de la pandemia de coronavirus, especialmente en países que ya enfrentan otras crisis.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, apeló a todos los gobiernos a respaldar con fuerza este plan, el cual dijo que ayudará a amortiguar el impacto del COVID-19 en contextos que ya son humanitariamente vulnerables.
“El COVID-19 está amenazando a toda la humanidad y toda la humanidad tiene que contraatacar”, dijo Guterres en el preámbulo del plan. “La acción global y la solidaridad son cruciales”.
“Este Plan de Respuesta Global Humanitaria al COVID-19 tiene como objetivo permitirnos luchar contra el virus en los países más pobres del mundo, y abordar las necesidades de las personas más vulnerables, como mujeres y niños, ancianos, y otros con incapacidades o enfermedades crónicas”, agrega.
Con financiamiento apropiado, dice Guterres, ofrecerá materiales de laboratorio para pruebas, suministros para proteger a los trabajadores de la salud y equipos médicos para tratar a los enfermos.
“Llevará agua y sanidad a lugares que los necesitan con desesperación y permitirá a los trabajadores humanitarios llegar hasta donde se necesiten”.
Este es un momento en que el mundo debe unirse para salvar vidas y luchar contra una amenaza común. La única guerra que debe librase ahora es la guerra contra el COVID-19, añade.
El documento, de 81 páginas, hace un análisis de necesidades humanitarias, fija responsabilidades estratégicas y posibles respuestas, coordina mecanismos y calcula los requisitos de financiamiento para la empresa, entre otras cosas.
También identifica los grupos de población más afectados y vulnerables en los países prioritarios.
El Plan de Respuesta Global Humanitaria señala tres prioridades estratégicas:
-Contener la propagación de la pandemia de COVID-19 y reducir su morbilidad y su mortalidad.
-Reducir el deterioro de los activos y derechos humanos, la cohesión social y su sustento.
-Proteger, asistir y abogar por los refugiados, los desplazados internos, los migrantes y las comunidades que los acogen particularmente vulnerables a la pandemia.
“Primero”, dijo Guterres, “hacer frente a la emergencia de salud; segundo, enfocarse en el impacto social y la respuesta económica, y tercero, tenemos una responsabilidad de recuperarnos mejor”.