La organización opositora de Nicaragua denominada Unidad Nacional Azul y Blanco (Unab) ha pedido a la Organización de los Estados Americanos (OEA) que convoque a los ministros de relaciones exteriores para “reaccionar con firmeza” tras la toma de la sede del organismo en Managua el pasado domingo 24 de abril.
Héctor Mairena, quien conforma este bloque opositor surgido tras las protestas contra el presidente Daniel Ortega en el año 2018, dijo a la Voz de América que el hecho de que el oficialismo haya cerrado la sede del organismo y posteriormente lo haya declarado de utilidad pública “es una barbaridad y un comportamiento que no observa las mínimas relaciones internacionales”.
“La Unab ha enviado una carta a la OEA porque Ortega no solo ha pisoteado acuerdos locales, sino internacionales. Deben actuar con firmeza”, dijo Mairena quien resaltó que desde el año 2018 “los nicaragüenses hemos sufrido los pisoteos del régimen, pero ahora esto escaló a nivel internacional”.
![Así lucía la sede de la OEA este jueves 28 de abril de 2022. [Foto Cortesía Oscar Navarrete La Prensa]](https://gdb.voanews.com/02af0000-0aff-0242-1c63-08da29a6a6be_w100_r1.jpeg)
“Eso no puede ser soslayado por la comunidad internacional. Como nicaragüenses, le decimos a la OEA que actúen. Los nicaragüenses no nos sentimos representados por ese régimen”, ha enfatizado.
Este viernes la presidenta del Consejo Permanente de la OEA, Elizabeth Clarke, convocó a las delegaciones de dicha entidad para una sesión extraordinaria solicitada por varios países, dentro de estos Estados Unidos, Brasil, Canadá, con la finalidad de considerar la ocupación de las oficinas en Nicaragua.
“Hay gran preocupación por [la] violación al derecho internacional y a la Convención de Viena por parte de Dictadura de Nicaragua”, comentó en Twitter el exdiplomático del gobierno de Daniel Ortega, Arturo McFields, quien desertó recientemente denunciado la grave crisis sociopolítica que se vive en Managua.
McFields además señaló que la resolución que se emita de la sesión extraordinaria será remitida a organismos internacionales y la ONU “para alertarlos sobre acciones de dictadura en Nicaragua”.
La administración del presidente Ortega enfrenta una grave crisis sociopolítica desde el año 2018 que estallaron manifestaciones en su contra dejando más de 300 muertos.
Ortega dijo que las protestas fueron un intento de golpe de Estado en su contra, según él, encabezado por líderes de oposición, sacerdotes y organizaciones de la sociedad civil.
También acusó a los organismos internacionales de mentir, según él, inflando cifras y divulgando “informes sesgados”.
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