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Papa Francisco envía carta a obispos de Venezuela


El pasado 30 de abril, el jerarca de la Iglesia católica hizo un llamado al Gobierno y a la sociedad venezolana para evitar que haya más violencia, pidió "soluciones negociadas" y respeto a los derechos humanos en un país en "grave crisis humanitaria".
El pasado 30 de abril, el jerarca de la Iglesia católica hizo un llamado al Gobierno y a la sociedad venezolana para evitar que haya más violencia, pidió "soluciones negociadas" y respeto a los derechos humanos en un país en "grave crisis humanitaria".

Mediante una carta, el papa Francisco llamó a los obispos venezolanos a hacer todo lo posible para que se establezcan puentes entre el Gobierno de Nicolás Maduro y sus opositores a fin de conseguir soluciones a la crisis nacional, informó la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV).

En la carta Francisco manifestó que sigue con “gran preocupación” la actual situación de Venezuela y señaló que los problemas en el país “se pueden solucionar si hay voluntad de establecer puentes, de dialogar seriamente y de cumplir con los acuerdos alcanzados”.

El Sumo Pontífice reiteró su llamado a “evitar cualquier forma de violencia, a respetar los derechos de los ciudadanos y a defender y promover la dignidad humana y los derechos fundamentales” en Venezuela.

“Les aseguro que estoy siguiendo con gran preocupación la situación del querido pueblo venezolano ante los graves problemas que le aquejan”, anotó Francisco en la misiva.
“Les aseguro que estoy siguiendo con gran preocupación la situación del querido pueblo venezolano ante los graves problemas que le aquejan”, anotó Francisco en la misiva.

“Siento un profundo dolor por los enfrentamientos y la violencia de estos días, que han causado numerosos muertos y heridos, y que no ayudan a solucionar los problemas, sino que únicamente provocan más sufrimiento y dolor”, puntualizó la carta con fecha 5 de mayo de 2017.

Francisco pide en el documento a los obispos colaborar con soluciones a los problemas en el país caribeño: "Queridos hermanos, deseo animarles a que no permitan que los amados hijos de Venezuela se dejen vencer por la desconfianza o la desesperación, pues estos son males que penetran en el corazón de las personas cuando no ven perspectivas de futuro".

Concluyó: “Les exhorto a seguir haciendo todo lo necesario para que este difícil camino sea posible”.

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