El papa Francisco denunció a los extremistas en el mundo que en sus palabras “pervierten” la religión para justificar su violencia.
Al llegar la capital de Albania el domingo, el papa dijo que “no hay que dejar que nadie se considere ‘el escudo’ de Dios mientras planean y llevan a cabo actos de violencia y opresión”.
El pontífice felicitó a la nación balcánica por ser un “ejemplo inspirador” donde los cristianos y los musulmanes han aguantado la brutal opresión bajo el comunismo, pero ahora viven y trabajan juntos en paz”.
El Papa celebró misa en la plaza Santa Teresa en Tirana y se reunió con el presidente albano, Bujar Nishani.
El renacimiento católico en Albania se debe en parte a la popularidad de Madre Teresa, que nació en lo que ahora es Macedonia, pero tenía origen albano.