El papa Francisco finalizó su gira por Asia tras un viaje de una semana que incluyó Sri Lanka y las Filipinas.
El sumo pontífice de la Iglesia Católica regresó al Vaticano este lunes, un día después de celebrar misa ante una multitud de alrededor de seis millones de personas en el Parque Rizal de Manila, sobrepasando los cinco millones que asistieron a la misa oficiada por el papa Juan Pablo II en el mismo lugar en 1995.
Durante su homilía, Francisco exhortó a los filipinos a rechazar “las estructuras sociales que perpetúan la pobreza, la ignorancia y la corrupción”, un tema que destacó cuando habló con el presidente filipino, Benigno Aquino, y otras autoridades el viernes.
La visita del papa Francisco a las Filipinas, que alberga 80 millones de católicos romanos, es la primera de un pontífice desde la visita de Juan Pablo II en 1995. Filipinas tiene la mayor población católica de cualquier país en Asia.
Las autoridades filipinas establecieron una fuerza de seguridad de casi 50.000 soldados y policías para proteger al papa Francisco. Los otros dos papas que visitaron las Filipinas fueron objetivos de intentos de asesinato.