El Papa Francisco visitó este lunes la tumba de San Pedro, en la necrópolis que se halla bajo la Basílica vaticana, y es el primer pontífice en descender al sitio para orar.
El Vaticano informó que el santo Padre rezó conmovido y en silencio durante unos minutos junto a la tumba, ubicada exactamente bajo el altar y la cúpula de basílica.
Luego recorrió las excavaciones en la necrópolis acompañado por Angelo Comastri, arcipreste de la basílica y de su secretario, Alfred Xuareb, entre otros.
“Primer Papa en descender a las excavaciones de la necrópolis vaticana, el Papa Francisco recorrió todo el camino central de la necrópolis, que se encuentra bajo la Basílica y las Grutas vaticanas”, indicó el comunicado.
Más temprano, el pontífice argentino hizo un llamado a los católicos para expresar su compromiso con "los sacramentos que hemos recibido", como el Bautismo que "nos hace hijos de Dios y la Eucaristía que nos une a Cristo".
En italiano y antes del Regina Coeli –el antiguo himno mariano que se canta en lugar del Angelus durante la Semana Santa— Francisco felicitó las Pascuas a todos y les agradeció su presencia "para compartir la alegría de la Pascua, el misterio central de nuestra fe".
"Que la fuerza de la Resurrección de Cristo pueda alcanzar a cada persona, especialmente a las que sufren, y a todas las situaciones necesitadas de confianza y esperanza", pidió.
El Vaticano informó que el santo Padre rezó conmovido y en silencio durante unos minutos junto a la tumba, ubicada exactamente bajo el altar y la cúpula de basílica.
Luego recorrió las excavaciones en la necrópolis acompañado por Angelo Comastri, arcipreste de la basílica y de su secretario, Alfred Xuareb, entre otros.
“Primer Papa en descender a las excavaciones de la necrópolis vaticana, el Papa Francisco recorrió todo el camino central de la necrópolis, que se encuentra bajo la Basílica y las Grutas vaticanas”, indicó el comunicado.
Más temprano, el pontífice argentino hizo un llamado a los católicos para expresar su compromiso con "los sacramentos que hemos recibido", como el Bautismo que "nos hace hijos de Dios y la Eucaristía que nos une a Cristo".
En italiano y antes del Regina Coeli –el antiguo himno mariano que se canta en lugar del Angelus durante la Semana Santa— Francisco felicitó las Pascuas a todos y les agradeció su presencia "para compartir la alegría de la Pascua, el misterio central de nuestra fe".
"Que la fuerza de la Resurrección de Cristo pueda alcanzar a cada persona, especialmente a las que sufren, y a todas las situaciones necesitadas de confianza y esperanza", pidió.