El papa Francisco pidió este domingo la liberación de rehenes, entre ellos seis monjas que fueron secuestradas en un autobús en Haití el viernes, y dijo que estaba rezando por la armonía social en el país.
Hombres armados secuestraron un autobús en la capital de Haití, Puerto Príncipe, con al menos seis monjas a bordo y se dirigieron a un destino desconocido tomando como rehenes a todos los pasajeros, informó el sábado Vatican News, citando a la Conferencia Haitiana de Religiosos.
"Con dolor recibí la noticia del secuestro en Haití de un grupo de personas, entre ellas seis religiosas", dijo Francisco tras su rezo semanal del Ángelus.
"Al pedir encarecidamente su liberación, rezo por la concordia social en el país y llamo a todos a poner fin a las violencias, que tanto sufrimiento causan a esa querida población", añadió.
La violencia lleva meses intensificándose en Haití, donde las bandas se disputan el poder y tratan de presionar al primer ministro interino, Ariel Henry, antes de que el 7 de febrero expire el acuerdo político que consolidó su poder.
Los hechos tuvieron lugar antes de una decisión judicial prevista para el 26 de enero sobre una fuerza multinacional dirigida por Kenia para hacer frente a la violencia de las bandas en el país, uno de los más pobres del hemisferio occidental.
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