El romance y matrimonio arreglado entre una linda chica de ascendencia palestina y el autor de la matanza en un club gay de Orlando es ahora objeto de investigación de las autoridades.
Poco a poco han comenzado a surgir detalles sobre Noor Zahi Salman, de 30 años, quien creció en el pequeño suburbio de Rodeo, California, y su relación con Omar Mateen, de 29 –guardia de seguridad, fisicoculturista y devoto musulmán— que terminaría matando a 49 personas e hiriendo a otras 53 en la peor masacre en la historia de Estados Unidos.
Las autoridades creen que Salman, segunda esposa de Mateen, se enteró con anticipación de los planes terroristas de su esposo.
La mujer declaró al FBI que acompañó a Mateen en por lo menos una visita al club antes del ataque del domingo en la madrugada, en lo que las autoridades describen como una visita de “reconocimiento”.
Los investigadores también creen que la pareja visitó Disney World en abril y Disney Spring, un centro comercial y de entretenimiento en Disney, en los días previos a la masacre.
Tanto Walt Disney World como otros parques de Orlando celebraron Días Gay entre el 31 de mayo y el 6 de junio, más o menos entre las mismas fechas en que la pareja visitó el club Pulse, donde ocurrió la masacre.
Salman dijo al FBI que se enteró de las intenciones yihadistas de su esposo, que intentó disuadirlo, pero negó haber conocido los detalles específicos.
Si bien, agentes del FBI visitaron la casa de la madre de Salman, en Rodeo, y han revisado el apartamento donde la pareja vivía en Fort Pierce, Florida, todavía no parecen tener suficiente evidencia del involucramiento de la esposa de Mateen como para acusarla de complicidad.
Sin embargo, la agencia Reuters aseguró citando a fuente informada sobre el tema, que un gran jurado federal había sido convocado y podría presentar cargos a la esposa de Mateen, tan pronto como el miércoles.
