La mayoría republicana en la Cámara de Representantes eligió este miércoles al legislador por Wisconsin, Paul Ryan, como su nominado para el nuevo presidente de la Cámara.
La nominación pone a Ryan en camino a reemplazar a John Boehner, quien ha anunciado su retiro, y podría impulsar un acuerdo de presupuesto a dos años dirigido a evitar un incumplimiento en los pagos de la deuda soberana que podría ser considerado por el pleno de la Cámara de Representantes este mismo día.
Ryan, originario de Wisconsin, ganó la aprobación de su partido por 200 votos contra 43, derrotando al representante de Florida, Daniel Webster, en una reunión a puerta cerrada de los miembros republicanos de la Cámara en el Capitolio.
Se espera que el pleno de la Cámara vote el jueves para elegir el nuevo presidente y que Ryan consiga una mayoría lo que lo colocaría en el cargo más importante de ese órgano legislativo.
En una sesión a puerta cerradas, antes de su nominación, Ryan dijo a sus colega republicanos que les dará oportunidad de participar en la formulación de leyes, y según uno de los asistentes que lo citó textualmente, dijo: "No planeo ser César, dando todas las órdenes aquí".
Si como se espera Ryan sea elegido, será una de las más poderosas figuras políticas de Estados Unidos, segundo en la orden de sucesión de la presidencia.
Ryan es un carismático vocero republicano defensor del recorte de los gastos fiscales y la eliminación de los déficits anuales. En 2012 fue nominado republicano a la vicepresidencia.
En los últimos días, él ha dicho que votará por el nuevo plan de gastos y el aumento de la autoridad de préstamo del país, un compromiso que Boehner y otros líderes republicanos alcanzaron con el presidente Barack Obama para evitar que la nación incumpla sus pagos de la deuda soberana, que se vencen la semana próxima.
Pero, al mismo tiempo dijo que el proceso para lograr el acuerdo "apesta" porque los líderes de la Cámara no lo hicieron aprobar de los legisladores de menor jerarquía.
"Lo que hemos escuchado de nuestros colegas en las últimas dos semanas es un deseo de borrar completamente la manera como se hacen las cosas y poner en marcha un proceso que brinde confianza, y comenzar a enfocarnos en grandes ideas", señaló Ryan en un comunicado.
El plan de gastos, dijo, "ayudará mucho a aliviar la incertidumbre que pesa sobre nosotros, y por eso voy a apoyarlo. Es hora de que demos la vuelta a la página de los últimos años y nos pongamos a trabajar en una agenda atrevida que podamos llevar al pueblo estadounidense".
El presidente de la Cámara de Representantes es el segundo en la línea de sucesión de la presidencia de la nación, si tanto el presidente y el vicepresidente electos mueren o dejan el cargo antes de que sus mandatos expiren. Sin embargo, esa sucesión de poner no ha ocurrido nunca en los 239 años de historia del país.