El vicepresidente Mike Pence comprometió el apoyo total de la administración Trump a funcionarios estatales de Washington mientras el saldo de víctimas fatales continuaba creciendo en ese estado del noroeste del país.
El estado ha sido el más golpeado por el brote de coronavirus en Estados Unidos, con lo por lo menos 70 personas contagiadas y 11 muertes. La mayoría de las víctimas fatales eran residentes del hogar para personas de la tercera edad, Life Care Center, ubicado en Kirkland, un suburbio al este de Seattle.
"Mientras el estado de Washington y el área de Seattle en particular, hacen frente al coronavirus, continuaremos asegurándonos que tengan el total apoyo de cada agencia en el gobierno federal”, dijo Pence después de hacer un recorrido por el centro de respuesta a emergencias del estado.
El vicepresidente también sostuvo una reunión con el gobernador Jay Inslee, miembros de la delegación congresional de Washington y funcionarios locales, para discutir el brote.
El vicepresidente derramó elogios sobre Inslee, un demócrata que el año pasado consideró buscar la nominación presidencial de su partido.
“Hemos venido trabajando con su gobernador y su equipo de forma perfecta”, dijo Pence.
Horas antes, Pence se había reunido con el presidente de la empresa 3M, Mike Roman, y con el gobernador de Minnesota, Tim Waltz, en la sede central de dicha compañía en las afueras de Minneapolis. La empresa es fabricante de mascarillas para evitar el contagio.
Pence le pidió a los estadounidenses no comprar o usar mascarillas, a menos que estén enfermos.
