La baja en los precios de la gasolina está afectando negativamente la salud de millones de personas, contribuyendo al incremento en los niveles de obesidad, según el profesor de la Universidad estatal de Georgia, Charles Courtemanche.
"He podido encontrar un enlace de causa, a medida que los precios de la gasolina bajan, y esta situación ha contribuido al aumento en los niveles de obesidad", dijo el experto a la Voz de América.
Otros investigadores identificaron que cuando el precio del combustible es más barato, los accidentes de tráfico no fatales a causa de conductores embriagados aumentan.
“El descenso de un dólar por galón de gasolina está asociado con más de 100 accidentes ocasionados por conductores bajo la influencia del alcohol en Mississippi", dijo Guangquibg Chi, profesor de la Universidad de Dakota del Sur.
Un estudio en Australia reveló que 1,3 millón de personas mueren en accidentes automovilísticos y lastiman a unos 50 millones más, cada año, alrededor del mundo.
Cifra que podría subir a medida que los individuos en países en desarrollo logran obtener más fondos para comprar vehículos.