Un riñón necesario para un trasplante fue entregado mediante un dron, informó el Centro Médico de la Universidad de Maryland, un desarrollo que podría anunciar un transporte de órganos más rápido y seguro.
El dron de alta tecnología especialmente diseñado fue equipado con un equipo para monitorear el riñón a lo largo de su viaje de tres millas (cinco kilómetros) hasta su receptor: una mujer de 44 años, de Baltimore que había pasado ocho años en diálisis antes del procedimiento
El avión no tripulado, que requería una autorización especial de los reguladores de aviación, despegó a la 1:00 am del 19 de abril y voló a una altura de 400 pies (120 metros) durante unos diez minutos antes de aterrizar en su destino.
El doctor Joseph Scalea, que formó parte del equipo de cirujanos que realizó el trasplante, elogió el éxito del proyecto y dijo que las entregas de aviones no tripulados podrían ayudar a superar las demoras que destruyen la viabilidad de un órgano.
"La próxima carrera podría ser de más de 30 millas, o 100. La distancia es relativamente poco importante", dijo a la AFP el miércoles. "La parte más importante es que pudimos implementar la tecnología de drones en el sistema actual de trasplantes y transporte".
Los métodos de transporte actuales incluyen costosos vuelos chárter o incluso vuelos comerciales variables, lo que en ocasiones ocasiona retrasos y suele costar alrededor de 5.000 dólares.
De acuerdo con United Network for Organ Sharing, en el 2018 había casi 114.000 personas en listas de espera para un trasplante de órganos en los Estados Unidos. Alrededor del 1,5% de los envíos de órganos de donantes fallecidos no llegaron a su destino previsto, mientras que casi el cuatro por ciento de los envíos de órganos tuvieron una demora imprevista de dos o más horas.
Scalea, quien ha fundado una compañía que administra datos para envíos de órganos, comparó el sistema con un servicio similar a Uber que, a la larga, resultaría menos costoso.