La alianza de combatientes kurdos y sirios apoyada por Estados Unidos ha lanzado una operación para recuperar Raqqa, la autodenominada capital del califato del grupo Estado islámico.
La comandancia de las Fuerzas Democráticas Sirias, o FDS, en Ein Issa, 50 kilómetros al norte de Raqqa, anunció el comienzo de la campaña el domingo en la cual Estados Unidos provee cobertura aérea.
“El comando general de las Fuerzas Democráticas Sirias anuncian el bendecido comienzo de su importante campaña militar para liberar la ciudad de Raqqa”, dijo en una conferencia de prensa el portavoz de la FDS, Jehan Sheikh Amad.
La ofensiva bautizada como “Furia en el Éufrates” sirve para aumentar la presión sobre ISIS en un momento critico en que sus combatientes tratan de defender Mosul.
El ataque ya había sido anunciado por el secretario de Defensa estadounidense, Ash Carter, el 25 de octubre, cuando dijo que la batalla por Raqqa se iba a “traslapar” con el asalto sobre Mosul.
Los aliados consideran que Raqqa podría ser usada como base para planes y ataques futuros de ISIS contra blancos en otros países, especialmente en Europa.
El ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Brian, dijo el domingo que "Mosul-Raqqa no pueden desasociarse porque el Estado islámico y los territorios que ocupa abarcan toda esa área".
Desde su fundación la FDS ha recuperado largas porciones de territorio antes dominado por ISIS a lo largo de la frontera siria-turca.
