Dos expertos en comunicación coincidieron en señalar que en general, todos los candidatos que aspiran a la presidencia de Estados Unidos, están cometiendo errores en la comunicación con los votantes hispanos, por lo cual pueden llegar a pagar un costo en las urnas.
El director del departamento de estudios latinoamericanos y manejo político de la Universidad George Washington, Roberto Izurieta, así como el periodista, Pablo Gato, quien tiene 30 años de trayectoria en los principales medios de comunicación estadounidenses y es director de su propia empresa de comunicaciones, ponen el acento en las fallas en aspectos de comunicación de las campañas políticas.
En particular, Izurieta dijo a la Voz de América que el mensaje hacia la comunidad hispana "ha sido casi ofensivo, se han sentiido excluidos los votantes hispanos".
Un ejemplo que señala Roberto Izurieta es el de las definciones. Algunos candidatos hablan de inmigrantes ilegales, otros de inmigrantes indocumentados y esa diferencia tiene grandes implicaciones, según el director del departamento de estudios latinoamericanos y manejo político de la Universidad George Washington (Vea de video).
Otro aspecto que Izureta destaca es que si de lo que se trata es de tratar de conquistar el voto de los hispanos, el experto sugiere seguir, no sólo las palabras y las actitudes, sino las acciones que emprendió el ex presidente George Bush, quien hizo algo concreto para lograr una reforma migratoria, o al menos "lo intentó".
En tal sentido, Izureta contrasta este aspecto con la actitud de Barack Obama frente a la reforma migratoria, un aspecto que le podría costa el voto hispano.
Por su parte, Pablo Gato, citó el ejemplo del sensible tema migratorio, el periodista señala que este es otro punto crítico, que desde el punto de vista comunicacional es crucial para lograr credibilidad: "las palabras tienen que ser respaldadas con acciones".
Para Gato, ambos partidos cometen errores de aproximación al público hispano, porque mientras unos creen que su corriente no es el partido natural de los hispanos, otros creen que si la opción natural, pero ninguno de los dos hace esfuerzos suficientes.
Sin embargo, tanto para quien resulte como nominado republicano, como para el presidente Obama en su apuesta a la reelección, la buena noticia es que "todavía quedan cuatro meses para componer" las campañas explica Izureta, pero de no hacerlo, todos podrían llegar a perder buena parte del voto hispano, aclara Gato.