Desde 1982, la empresa Landry & Kling se ha especializado en el concepto de alejar a los empleados de la rutina de un hotel o entrenamientos de trabajo a puertas cerradas.
Trinidad y Tobago, sede de la quinta Cumbre de las Américas, recurrió a Landry & Kling el pasado abril para solucionar la falta de capacidad de alojamiento en la isla durante el evento.
El gobierno del archipiélago utilizó los barcos Carnival Victory y Caribbean Princess para alojar cientos de periodistas y representantes de países participantes.
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Según Ramón Santos, vicepresidente de Desarrollo de Negocios de Landry & Kling, los cruceros son más que hoteles flotantes.
“Estos barcos tienen facilidades de conferencia, salones donde pueden hacerse distintos tipo de eventos, reuniones, fiestas, cockteles” explicó Santos a la Voz de América.
Santos es considerado un experto en cuanto a la recomendación de destinos especiales y de negocios directos con empresas y gobiernos interesados en los cruceros.
Una de las principales tareas de la empresa es ofrecer la embarcación adecuada para el evento adecuado.
“Llevamos más de 25 años haciendo este tipo de eventos, nuestra compañía se encarga de hacer el proceso de investigación, para entender que es lo que ellos necesitan y recomendar el barco apropiado” dijo Santos.
Landry & Kling ha cubierto todo tipo de eventos como el "Super Bowl 2005" en Jacksonville, Florida, además de la Copa Mundial de Cricket en el 2007 y las Olimpiadas de Barcelona, entre otros.
Cualquier tipo de eventos, sin importar el número de personas, o el destino de su crucero - las reuniones en altamar son las que las personas más recuerdan y dejan una memoria inolvidable.La entrevista completa con Ramón Santos se puede ver en nuestro programa de Foro Interamericano.