En dialogo con la agencia Reuters, el presidente Donald Trump, dijo que no espera mucho progreso en las conversaciones comerciales con China esta semana en la capital estadounidense.
En la entrevista, Trump afirmó que no “tiene un período de tiempo” determinado para resolver la disputa comercial con China. “Soy como ellos, tengo un horizonte a largo plazo”, agregó.
Las conversaciones de esta semana se producen al tiempo que entran en vigor nuevos aranceles a bienes chinos por valor de 16.000 millones de dólares, junto a medidas de represalia por parte de Beijing sobre bienes estadounidenses valorados en un monto similar.
La Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos también está realizando audiencias esta semana sobre propuestas para otros gravámenes sobre bienes del gigante asiático por valor de 200.000 millones de dólares.
El presidente Trump afirmó que los negociadores chinos llegarían en corto tiempo y agregó que no anticipa demasiado de las discusiones entre funcionarios de rango medio.
A todo este escenario es al que analistas económicos atribuyen la presente inestabilidad de los mercados y cuyas consecuencias inmediatas las ha experimentado el agro estadounidense al cual el gobierno tuvo que otorgar una ayuda en el orden de los 12 mil millones de dólares para poder enfrentar las consecuencias de las medidas arancelarias del presidente Trump.
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