Dos senadores estadounidenses, un republicano y un demócrata, se reunieron el jueves en el sur de Florida con miembros de la comunidad venezolana en una muestra de solidaridad bipartidista con el pueblo de ese país.
Los legisladores por Florida, Marco Rubio (republicano) y Bill Nelson (demócrata) han condenado abiertamente la represión desatada por el gobierno del presidente Nicolás Maduro contra las protestas antigubernamentales que desde hace dos meses sacuden a Venezuela.
A principios de mes, el senador Rubio se reunió con el canciller de Panamá, Francisco Álvarez de Soto, para discutir la crisis política en Venezuela, y al término del encuentro puso de relieve que el gobierno venezolano se había convertido en un “régimen militar autoritario”.
Rubio calificó de bochornoso que la mayoría de los países latinoamericanos se hayan hecho de la vista gorda frente a esa situación y dijo sentirse orgulloso de que Panamá hubiese adoptado una postura de liderazgo para hallar una “solución legítima” a la crisis venezolana.
El mes pasado, por su parte, el senador Nelson pidió a la Organización de Estados Americanos (OEA) que investigara las denuncias de abusos contra los derechos humanos en Venezuela, que eran un remanente de la “era de Hugo Chávez”.
En el sur de Florida reside la comunidad más numerosa de venezolanos que hay en Estados Unidos, en su mayoría opositores del presidente Maduro.
Los legisladores por Florida, Marco Rubio (republicano) y Bill Nelson (demócrata) han condenado abiertamente la represión desatada por el gobierno del presidente Nicolás Maduro contra las protestas antigubernamentales que desde hace dos meses sacuden a Venezuela.
A principios de mes, el senador Rubio se reunió con el canciller de Panamá, Francisco Álvarez de Soto, para discutir la crisis política en Venezuela, y al término del encuentro puso de relieve que el gobierno venezolano se había convertido en un “régimen militar autoritario”.
Rubio calificó de bochornoso que la mayoría de los países latinoamericanos se hayan hecho de la vista gorda frente a esa situación y dijo sentirse orgulloso de que Panamá hubiese adoptado una postura de liderazgo para hallar una “solución legítima” a la crisis venezolana.
El mes pasado, por su parte, el senador Nelson pidió a la Organización de Estados Americanos (OEA) que investigara las denuncias de abusos contra los derechos humanos en Venezuela, que eran un remanente de la “era de Hugo Chávez”.
En el sur de Florida reside la comunidad más numerosa de venezolanos que hay en Estados Unidos, en su mayoría opositores del presidente Maduro.