Las fuerzas rusas atacaron infraestructuras energéticas en la región meridional de Mikoláiv al lanzar 56 drones y un misil en un ataque nocturno contra Ucrania.
El gobernador Vitali Kim dijo en un comunicado en la aplicación de mensajería Telegram que el ataque había interrumpido el suministro eléctrico a algunos consumidores y que no había habido víctimas.
La fuerza aérea ucraniana también informó de cinco impactos en instalaciones de infraestructura en regiones cercanas a la línea del frente.
Dijo que se derribaron 22 drones y que perdió el rastro de otros 27 que probablemente cayeron en territorio ucraniano tras el empleo de medidas activas de guerra electrónica. Otros dos drones cayeron en Bielorrusia.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, dijo que restos de drones cayeron en el terreno de una guardería de la capital.
Las autoridades de Kiev y la región circundante no informaron de daños en infraestructuras críticas ni de víctimas tras el ataque.
Las autoridades regionales de la región nororiental de Sumy dijeron que un ataque con dron causó un incendio en un edificio administrativo y dañó dos coches.
Las fuerzas rusas han bombardeado infraestructuras críticas en ciudades ucranianas antes de los meses de invierno, lo que ha llevado a las autoridades de Kiev a intensificar las peticiones de defensa aérea adicional a sus aliados.
Rusia niega haber atacado a civiles, aunque ha matado a miles durante los más de dos años y medio de guerra.
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