Un estudio revela que el llamado “tabaquismo pasivo” o “de segunda mano”, puede ser nocivo para aquellos menores que viajan en el auto donde se fuma.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el humo de segunda mano posee unas partículas finas tres veces superior a la tasa máxima fijada, lo cual afecta la calidad del aire.
La OMS advierte que este tipo de partícula fina puede afectar a los niños que viajan en el interior del auto donde se fuma al mismo tiempo.
El estudio fue dirigido por la Universidad de Aberdeen (Escocia) bajo el liderazgo del doctor Sean Semple y publicado por la revista Tobacco Control, una unidad del British Medical Journal.
El estudio se hizo sobre 83 trayectos en auto de 30 minutos cada uno.
34 de esos viajes fueron hechos por no fumadores y el resto por fumadores. En el auto de los “fumadores” las partículas finas se elevaron a 85, donde 25 es el nivel máximo para la calidad interior del aire.
Entre más alto el nivel de partículas finas, más alto el riesgo de contraer enfermedades pulmonares e incluso cáncer de pulmón.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el humo de segunda mano posee unas partículas finas tres veces superior a la tasa máxima fijada, lo cual afecta la calidad del aire.
La OMS advierte que este tipo de partícula fina puede afectar a los niños que viajan en el interior del auto donde se fuma al mismo tiempo.
El estudio fue dirigido por la Universidad de Aberdeen (Escocia) bajo el liderazgo del doctor Sean Semple y publicado por la revista Tobacco Control, una unidad del British Medical Journal.
El estudio se hizo sobre 83 trayectos en auto de 30 minutos cada uno.
34 de esos viajes fueron hechos por no fumadores y el resto por fumadores. En el auto de los “fumadores” las partículas finas se elevaron a 85, donde 25 es el nivel máximo para la calidad interior del aire.
Entre más alto el nivel de partículas finas, más alto el riesgo de contraer enfermedades pulmonares e incluso cáncer de pulmón.