Un estudio de la NASA divulgado el miércoles informó que el asteroide Bennu, tiene pocas probabilidades de chocar con la Tierra en los próximos dos siglos, aunque la posibilidad sigue siendo latente.
Según los cálculos más precisos de los investigadores de la agencia espacial estadounidense, Bennu tiene una probabilidad de 1 entre 1.750 de impactar a nuestro planeta hasta el año 2300.
Aun así, la probabilidad es bastante mayor que 1 entre 2.700 calculada en estudios anteriores, aunque los científicos aseguran que la amenaza no es alarmante.
El reporte del miércoles se basó en datos recopilados de la nave espacial OSIRIS-Rex, que revisó las órbitas futuras de cuerpo sideral y mejoró la capacidad de los científicos de determinar la probabilidad de impacto y predecir las órbitas de otros asteroides, explicó la NASA.
OSIRIS-REx viajó hasta Bennu y traerá a la Tierra una pequeña muestra tomada del asteroide para analizar. La misión fue lanzada el 8 de septiembre desde Cabo Cañaveral y llegó a Bennu en 2018. Se espera que regrese con la muestra para 2023.
Bennu es un asteroide de unos 500 metros de diámetro que orbita alrededor del Sol y cuando se acerca a este astro queda en el interior de la órbita de la Tierra, de ahí la posibilidad de una colisión.
Bennu se acercará bastante a la Tierra en 2135 cuando pase a la mitad de la distancia de la Luna.
Los científicos dicen que una colisión del asteroide con la Tierra sería devastadora, aunque menor que el choque que aniquiló los dinosauros. Su cráter sería de 10 a 20 veces su tamaño.
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