Un nuevo medicamento candidato a servir como vacuna contra el COVID-19 ha mostrado datos prometedores, anunciaron el miércoles el gigante farmacéutico Pfizer y la firma biotécnica alemana BioNTech.
En menos de un mes, pacientes tratados con el medicamento desarrollaron anticuerpos al coronavirus a los niveles, o a mayores niveles, de los que se encuentran en la sangre de los pacientes recuperados de la enfermedad, reportaron las compañías.
El estudio fue pequeño, con 45 adultos de entre 18 y 55 años de edad. Los pacientes reportaron efectos secundarios moderados, incluyendo dolor en el lugar de la inyección y fiebres leves, lo cual son reacciones comunes en vacunas. Las compañías señalaron que no saben cuánto tiempo durarán las reacciones inmunológicas, o qué nivel de inmunidad necesitan los humanos para protegerse del virus.
El programa de Pfizer y BioNTech incluye tres otras posibles vacunas, pero la que fue destacada el miércoles es la que más avanzada está en el proceso de prueba. Los investigadores usarán la información preliminar para escoger entre los medicamentos en prueba y determinar la dosificación para hacer una prueba más grande, involucrando a 30.000 personas. Esta siguiente prueba podría empezar a finales del mes si el proyecto es aprobado.
Más datos este mes
Pfizer y BioNTech dicen que podrían fabricar hasta 100 millones de dosis para finales de año, y unos 1.200 millones para finales del 2021. Datos de una prueba alemana de la misma vacuna serán publicados a mediados de julio.
Por lo menos 25 posibles vacunas contra el COVID-19 han avanzado hasta las pruebas humanas, según un monitoreo del desarrollo de vacunas en la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres. Vacunas de Moderna, CanSino Biologics e Inovio Pharmaceuticals están entre las más prometedoras. Ningún medicamento ha sido autorizado aún para su uso comercial.
El martes se cumplieron seis meses desde que la Organización Mundial de la Salud recibió reportes de misteriosos polos de casos de neumonía en China. Más de 10,3 millones de casos de COVID-19 han sido confirmados desde entonces alrededor del mundo.