Uno de los atacantes en la masacre en California el pasado fin de semana había planeado un ataque previo con un vecino, pero no lo llevó a cabo.
La información fue revelada en medios de prensa estadounidenses el miércoles por la noche después que el director del FBI, James Comey, dijera que Syed Rizwan Farook y su esposa, Tashfeen Malik, se radicalizaron mucho antes del ataque durante una reunión festiva en su oficina.
Un vecino de Farook, Enrique Márquez, quien es acusado de comprar los rifles usados en el ataque de la semana pasada, habría dicho a las autoridades que él y Farook conspiraron para un ataque en California hace tres años pero eventualmente desistieron de la idea.
“Ya desde fines de 2013 estaban hablando sobre guerra santa y martirio, antes de que se comprometieran, se casaran y vivieran juntos en Estados Unidos”, declaró Comey ante una comisión del Congreso.
La pareja mató a 14 personas e hirió a otras 21 en una reunión en trabajadores gubernamentales locales en San Bernardino, California, al este de Los Ángeles.
El FBI está investigando el ataque de San Bernardino como un acto de terrorismo, pero no hay señales de que el estadounidense Farook y su esposa pakistaní Malik, fueran parte de una célula o grupo. Ambos fueron muertos en un tiroteo con la policía después de huir del lugar de la masacre.
