El alcalde de San Salvador Ernesto Muyshondt informó sobre las medidas que se implementarán en la capital de El Salvador para enfrentar la alerta por coronavirus.
El edil explicó que, a través del Departamento de Promoción de Salud de esa cartera, se realizarán jornadas médicas, charlas preventivas y entrega de alcohol gel en distintas comunidades, centros escolares y las principales plazas de la ciudad.
Además, se brindará información sobre los principales lineamientos en materia de prevención otorgados por la Organización Mundial de la Salud.
“Invitamos a las 261 alcaldías restantes del país a que nos sumemos a realizar este tipo de acciones, porque este no es un problema del gobierno, este es un problema de todos los salvadoreños, de todos los que podemos incidir y quienes más tenemos un contacto directo, inmediato con la población somos los alcaldes y todos los colaboradores de las distintas alcaldías del país”, indicó Muyshondt.
El alcalde aclaró que todas las actividades previstas a realizarse en las diferentes plazas del centro de San Salvador, quedan suspendidas para evitar cualquier riesgo de contagio.
“Quedan suspendidas todas las actividades municipales donde hay concentraciones grandes de personas, como conciertos y ese tipo de actividades donde se provoca la concentración en lugares muy reducidos, mientras pase la emergencia que está viviendo nuestro país”.
De acuerdo con lo dado a conocer por la institución por medio de un comunicado de prensa, se invirtió más de 15 mil dólares para la compra de alcohol gel y la difusión de una campaña de prevención donde participarán otras instancias locales y gubernamentales.
“San Salvador no solo es una ciudad que atiende a los capitalinos, en nuestra ciudad duermen cerca de 600 mil personas, y transitan a diario cerca de 2 millones de personas, la tercera parte de la población salvadoreña”, puntualizó el alcalde.
Aunque El Salvador no ha reportado casos sospechosos de COVID-19 ha tomado una serie de acciones preventivas. El martes, Carolina Recinos, comisionada presidencial del Gabinete de Gobierno dijo que el país había tomado una nueva medida migratoria, de pedir pasaporte, para controlar el flujo de personas que entran al país desde Guatemala.
Previo a este aviso no era necesario el pasaporte, ya que, entre ambos países, desde 2016 existe un acuerdo conocido como CA-4 que permite a los ciudadanos centroamericanos cruzar entre las naciones sólo con una identificación.
