El presidente ruso, Vladimir Putin, recibió el miércoles al secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, en medio de nuevas tensiones por sus propias declaraciones y las del presidente estadounidense, Donald Trump.
La reunión con Tillerson tuvo lugar horas después de que Putin dijo que la relación de Moscú con Estados Unidos se ha deteriorado desde que Trump asumió el poder hace tres meses.
"Se puede decir que el nivel de confianza en el nivel de trabajo, especialmente en el nivel militar, no ha mejorado, pero probablemente se ha degradado", dijo Putin en una entrevista transmitida el miércoles por el canal de televisión estatal Mir.
Putin ofreció sus ideas mientras los principales diplomáticos de los dos países, discutían en Moscú sobre el apoyo de Rusia al sitiado presidente sirio Bashar al-Assad y el ataque de misiles estadounidenses contra Siria la semana pasada tras el uso de armas químicas en un ataque contra civiles por parte del régimen sirio.
Los responsables de la seguridad nacional estadounidense culparon el martes al ataque con armas químicas contra Assad, rechazando las declaraciones rusas de que el asalto al gas sarín fue una provocación rebelde siria o ocurrió cuando aviones de guerra sirios bombardearon un depósito de municiones rebelde.
"¿Dónde está la prueba de que las tropas sirias usaron armas químicas?" —preguntó Putin. "No hay ninguna, pero hubo una violación del derecho internacional, eso es un hecho obvio".
Tensa reunión
Las declaraciones de Putin y otros elementos hicieron que las expectativas iniciales de que el gobierno del presidente Trump tuviera una buena relación con Rusia chocaron el miércoles con la realidad.
Lavrov, un veterano diplomático cuya encendida defensa de las políticas de Putin ha frustrado a varios predecesores de Tillerson, dijo al recibir a Tillerson que su gobierno tiene muchas preguntas sobre lo que describió como ideas ambiguas y contradictorias que recibe del nuevo gobierno del presidente Donald Trump, añadiendo que es importante para Rusia comprender las intenciones de Estados Unidos.
Tillerson fue más breve en sus declaraciones iniciales, pero reiteró que las líneas de comunición entre las dos potencias “deben siempre permanecer abiertas”.
Tillerson, el primer miembro del gobierno de Trump que visita Rusia, está en una misión por ahora fútil para persuadir a Putin de que retire su apoyo a Assad.
Mientras Tillerson llegaba a Moscú, el presidente Trump describía a Assad como "un animal".
"Francamente, Putin apoya a una persona que es de verdad una persona malvada. Creo que es muy malo para Rusia", dijo Trump a la cadena Fox Business. "Creo que es muy malo para la humanidad”.