Siria dijo este martes que acepta un plan para el cese el fuego propuesto por Estados Unidos y Rusia que comenzaría el sábado.
Una declaración del gobierno dijo que las fuerzas militares continuarán sus operaciones contra el grupo Estado islámico y grupos vinculados a al-Qaida.
El plan estadounidense ruso no se aplica a esos militantes y cualquier otro grupo tiene hasta el viernes para confirmar su participación.
El principal grupo de oposición sirio Comité de Altas Negociaciones dijo el lunes por la noche que está de acuerdo con el cese el fuego siempre que se cumplan sus exigencias de levantar los sitios, entrega de ayuda humanitaria y el fin de los bombardeos de civiles.
En una declaración conjunta el lunes, Estados Unidos y Rusia dijeron que bajo el plan las partes involucradas en el conflicto limitarían cualquier uso de la fuerza a situaciones como responder en defensa propia. Las partes también acordaron proveer acceso irrestricto a los grupos humanitarios que distribuyen ayuda en áreas asediadas.
El enviado de las Naciones Unidas para Siria, Staffan de Mistura, dijo que el acuerdo es una largamente esperada señal de esperanza.
El presidente Barack Obama habló por teléfono con su homólogo ruso, Vladimir Putin, el lunes, para solicitarle que cese los bombardeos contra fuerzas moderadas de la oposición siria. El portavoz presidencial Josh Earnest, dijo que Obama destacó la importancia de que Rusia juegue ahora un rol constructivo.
Entre tanto el secretario de Estado John Kerry enfrentará a escépticos senadores este martes cuando comparezca ante un panel encabezado por republicanos, un día después de que Estados Unidos y Rusia acordaran un nuevo cese el fuego para Siria.
Kerry testificará este martes ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado en medio de interrogantes sobre el cumplimiento de la tregua y cómo se enfrentará a los violadores del acuerdo.
