Once mil sirios habrían huido en las últimas 24 horas hacia tres países vecinos luego de que combatientes rebeldes se tomaran Ras al-Ain, una localidad en la frontera.
Este es uno de los mayores éxodos de refugiados desde que la crisis se agudizó.
La dividida oposición de Siria se reunió en Doha, bajo una creciente presión de Estados Unidos y Qatar para que muestre unidad y forme una instancia capaz de gobernar el país si el presidente Bashar al-Assad es derrocado.
"El cruce fronterizo es importante porque abre otra línea hacia Turquía, donde podemos enviar los heridos y obtener suministros", dijo Khaled al-Walid, jefe de un grupo rebelde.
Este es uno de los mayores éxodos de refugiados desde que la crisis se agudizó.
La dividida oposición de Siria se reunió en Doha, bajo una creciente presión de Estados Unidos y Qatar para que muestre unidad y forme una instancia capaz de gobernar el país si el presidente Bashar al-Assad es derrocado.
"El cruce fronterizo es importante porque abre otra línea hacia Turquía, donde podemos enviar los heridos y obtener suministros", dijo Khaled al-Walid, jefe de un grupo rebelde.
