SpaceX lanzó con éxito un cohete con suministros para la estación espacial internacional.
La nave contiene un importante puerto de acoplamiento y un decodificador de ADN para investigación genética en el espacio.
La pieza de acoplamiento es necesaria para las nuevas cápsulas tripuladas de Estados Unidos que se presentarán en 2017.
El cohete no tripulado Falcon despegó este lunes a las 12:45 a.m, con un clima ideal para el lanzamiento.
A bordo del cohete se encuentra una réplica del puerto de acoplamiento que fue destruido en el accidente de lanzamiento de SpaceX a mediados del año pasado.
Este es el puerto número 2, según las NASA se necesita al menos uno y preferiblemente dos de estos puertos, para las nuevas cápsulas tripuladas que se desarrollan de manera conjunta por SpaceX y Boeing.
Los estadounidenses se han limitado a viajar a la estación espacial internacional en cohetes rusos desde que los transbordadores dejaron de volar hace cinco años.
Las cápsulas SpaceX Dragon y Boeing Starliner aliviarán esta dependencia rusa.
Además, la empresa recuperó los propulsores de la primera fase del vuelo, que aterrizaron en la base de la Fuerza Aérea de Cabo Cañaveral, tras un despegue vertical.
Es el segundo aterrizaje de este tipo para una misión orbital y cumple el objetivo de la empresa de recuperar los materiales empleados.