El retrato de Cristo “Salvator Mundi”, una rara pintura de Leonardo da Vinci que muestra a Cristo mientras sostiene un orbe de cristal, se vendió el miércoles por una cifra récord de $450 millones de dólares.
La subasta se realizó en la casa Christie's de Nueva York, obteniendo más del doble que la marca anterior para una obra de arte en subasta.
La pintura, que una vez fue vendida por apenas 125 dólares, fue redescubierta recientemente. Era el último da Vinci en manos privadas y logró más de cuatro veces los 100 millones de dólares estimados por Christie’s antes de la subasta.
El récord anterior lo tenía la obra “Les Femmes D‘Alger” (Mujeres de Argel) de Pablo Picasso, vendida en $179,4 millones de dólares en mayo del 2015, también en Christie's.
El mayor precio por cualquier tipo de obra de arte había sido de 300 millones de dólares por "Intercambio" de Willem de Kooning, que fue vendida de manera privada en septiembre de 2015.
“Salvator Mundi” (Salvador del Mundo) fue adquirida por un comprador no identificado que ofertó vía telefónica tras una puja de casi 20 minutos. Christie’s solo dijo que el comprador era un coleccionista privado europeo, pero medios lo identificaron como el multimillonario ruso Dmitry Rybolovlev.
El retrato restaurado, una representación etérea de Jesús que data de aproximadamente el 1500, es uno de los menos de 20 cuadros conocidos del artista del Renacimiento que aún existen.
Registrado por primera vez en la colección privada del rey Carlos I, la obra fue subastada en 1763 antes de desaparecer hasta 1900, para cuando se había repintado el rostro y el cabello de Cristo, una práctica “bastante común” anteriormente, según Alan Wintermute, especialista senior de Christie en pinturas de los Antiguos Maestros.
Vendida en Sotheby’s a un coleccionista estadounidense en 1958 por solo 45 libras (unos 126 dólares en ese momento), volvió a ofrecerse en 2005 como una copia de la obra maestra. La pintura es el primer descubrimiento de un cuadro de da Vinci desde 1909.
El nuevo dueño comenzó el proceso de restauración y tras unos seis años de investigación el cuadro fue autenticado como la obra maestra de da Vinci de más de 500 años de antigüedad, culminando en una exposición en la Galería Nacional de Londres en 2011.