El padre de Taylor Swift no enfrentará cargos después de ser acusado por un paparazzo de agredirlo en el paseo marítimo de Sídney horas después de que terminara la gira australiana de la estrella del pop el mes pasado.
El fotógrafo Ben McDonald había alegado que uno de los guardias de seguridad de Swift le puso un paraguas en la cara y la cámara y que el padre de la cantante, Scott Swift, lo golpeó en el muelle de Neutral Bay, donde padre e hija acababan de desembarcar de un yate el 27 de febrero.
Los representantes de Taylor Swift respondieron acusando a miembros de los medios de comunicación de agresión durante la interacción.
La policía investigó el incidente y anunció el miércoles que “no se tomarían más medidas policiales”.
“No se detectaron delitos, y la investigación concluyó sin que se requiriera ninguna otra acción de la ley”, dijo el comunicado de la Fuerza de Policía de Nueva Gales del Sur.
Más de 600.000 fans vieron la gira Eras de Swift en siete conciertos en estadios australianos.
Su gira rompió récords cuando, según los informes, recaudó más de 1.000 millones de dólares el año pasado. La película de la gira rápidamente ocupó el número 1 en taquilla y se convirtió en el filme de conciertos más taquillero hasta la fecha.
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