Un nuevo informe dice que 2020 fue un año récord para el descubrimiento de nuevos asteroides, particularmente aquellos con órbitas cercanas a la Tierra a pesar de que la pandemia COVID-19 cerró varios observatorios.
El informe, publicado el jueves en la revista científica Nature, dice que los astrónomos registraron 2.958 asteroides cercanos a la Tierra previamente desconocidos en el transcurso del año, la mayor cantidad desde 1998, año en que la agencia espacial estadounidense, la NASA, comenzó a rastrear tales objetos.
Más de la mitad de los asteroides y otros objetos registrados fueron descubiertos por el Catalina Sky Survey en Arizona, que usa sus tres telescopios para buscar rocas espaciales potencialmente amenazantes. Los astrónomos descubrieron 1.548 objetos cercanos a la Tierra, incluso con el centro cerrado brevemente la primavera pasada debido a la pandemia, y un cierre más prolongado en junio, debido a un incendio forestal en el área.
Entre los descubrimientos de Catalina 2020 se encontraba una rara "miniluna" llamada 2020 CD3, un pequeño asteroide de menos de 3 metros de diámetro que había sido atrapado temporalmente por la gravedad de la Tierra. La miniluna se separó de la órbita de la Tierra en abril pasado.
El informe dice que otros 1.152 descubrimientos provienen de los telescopios de inspección Pan-STARRS en Hawai. Uno de los objetos descubiertos no era una roca espacial del todo, sino un cohete propulsor descartado que había estado dando vueltas en el espacio desde 1966 cuando ayudó a lanzar una nave espacial de la NASA a la Luna.
El informe dice que por lo menos 107 de los objetos descubiertos el año pasado estuvieron más cerca de la Tierra que la distancia entre el planeta y la Luna.
Entre los casi accidentes del año pasado se encontraba el diminuto asteroide 2020 QG, que pasó a solo 2.950 kilómetros sobre el Océano Índico en agosto. Ese fue el acercamiento más próximo conocido de un objeto del espacio exterior, hasta sólo tres meses después, cuando otro objeto pequeño, llamado 2020 VT4, pasó a menos de 400 kilómetros (aproximadamente la longitud del estado de Nueva York) del planeta.
Los observadores no descubrieron el 2020 VT4 hasta 15 horas después de que hubiera volado por la tierra. El científico dice que si hubiera golpeado, probablemente se habría desintegrado en la atmósfera de la Tierra.
La NASA creó el Centro de Objetos Cercanos a la Tierra (CNEO, por sus siglas en inglés) en 1998, cumpliendo con una solicitud del Congreso de rastrear y catalogar al menos el 90% de los objetos espaciales de un kilómetro o más que pueden acercarse a la Tierra y ser una amenaza. Desde entonces, CNEO y sus astrónomos colaboradores han registrado más de 25.000 objetos de este tipo.