Gracias a los teléfonos inteligentes y el internet, podemos salir de compras sin realmente salir de compras, una contradicción lógica desde el punto de vista de los teléfonos inteligentes.
Una gran cantidad de aplicaciones nos permiten identificar productos, comparar precios e incluso encontrar increíbles ofertas. Evitar buscar estacionamiento, o las interminables colas para pagar y el estrés de no encontrar tallas a nuestra medida.
Sin embargo, incluso si te consideras un profesional de las compras en internet, es importante tomar en cuenta algunas recomendaciones.
Por ejemplo, utiliza tu tarjeta de crédito, en lugar de la de débito. Pagos con las tarjetas de crédito pueden ser retenidos si el banco tiene alguna sospecha de fraude o de que la tarjeta ha sido robada. Pero con una tarjeta de débito la tienda se paga directamente de la cuenta bancaria del consumidor, sin ninguna demora.
Y cuidado con los puntos públicos de acceso a WiFi públicos como en cafeterías, parques o librerías. Si la red no es segura, la información de pago podría verse comprometida.
Leer los términos de la compra en línea debería ser también una costumbre. Podríamos estar firmando inadvertidamente la aceptación de un servicio que simplemente no deseamos, o incluso comprando productos sin garantía o derecho a devolución.
De acuerdo con un estudio realizado por la firma NPD, el 75 por ciento de los propietarios de teléfonos inteligentes utilizan sus dispositivos móviles para realizar compras.
Y se calcula que durante las ventas especiales de este “Viernes Negro”, únicamente este grupo realizará unos $80 mil millones de dólares en compras en internet.
Una gran cantidad de aplicaciones nos permiten identificar productos, comparar precios e incluso encontrar increíbles ofertas. Evitar buscar estacionamiento, o las interminables colas para pagar y el estrés de no encontrar tallas a nuestra medida.
Sin embargo, incluso si te consideras un profesional de las compras en internet, es importante tomar en cuenta algunas recomendaciones.
Por ejemplo, utiliza tu tarjeta de crédito, en lugar de la de débito. Pagos con las tarjetas de crédito pueden ser retenidos si el banco tiene alguna sospecha de fraude o de que la tarjeta ha sido robada. Pero con una tarjeta de débito la tienda se paga directamente de la cuenta bancaria del consumidor, sin ninguna demora.
Y cuidado con los puntos públicos de acceso a WiFi públicos como en cafeterías, parques o librerías. Si la red no es segura, la información de pago podría verse comprometida.
Leer los términos de la compra en línea debería ser también una costumbre. Podríamos estar firmando inadvertidamente la aceptación de un servicio que simplemente no deseamos, o incluso comprando productos sin garantía o derecho a devolución.
De acuerdo con un estudio realizado por la firma NPD, el 75 por ciento de los propietarios de teléfonos inteligentes utilizan sus dispositivos móviles para realizar compras.
Y se calcula que durante las ventas especiales de este “Viernes Negro”, únicamente este grupo realizará unos $80 mil millones de dólares en compras en internet.