Chuck Hagel dijo el jueves que las tropas estadounidenses que llegaron recientemente a Irak no entraran en combate porque los iraquíes "se pueden defender por sí mismos".
"Ninguno de los soldados desempeñará misiones de combate. El presidente Obama fue bien claro en que las tropas de combate estadounidenses no van a luchar en Irak otra vez", agregó.
Por su parte, el comandante de las fuerzas militares de EE.UU., general Martin Dempsey, explicó que los efectivos estadounidenses aún protegen parte del aeropuerto de Bagdad.
Según Dempsey, la parte del aeropuerto que está siendo protegida es aquella que se necesita para el reabastecimiento de la logística o una potencial evacuación.
EE.UU. mantiene en Irak unos 650 soldados, 470 de ellos dedicados a proteger al personal estadounidense, las instalaciones de la embajada y el aeropuerto internacional de Bagdad.
El resto están evaluando la situación de seguridad en Irak y ayudando a las fuerzas iraquíes para hacer frente a la amenaza de los extremistas islámicos que han capturado importantes ciudades raquíes.