El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, visitó el jueves la sede de la Unión Europea en Bruselas para reunirse con el presidente del Consejo, Donald Tusk; con el de la Comisión, Jean-Claude Juncker, y con otros funcionarios comunitarios.
Trump pareció recibir una cálida bienvenida de los líderes, a pesar de que en los últimos meses elogió públicamente la decisión británica de salir del bloque y describió a la UE como “un vehículo para Alemania”. Desde su llegada a la Casa Blanca, Trump adoptó un tono menos beligerante, calificando el bloque de “maravilloso” y señalando que una Europa fuerte es muy importante para él y para Estados Unidos.
Tras su encuentro, Donald Tusk, dijo que él y el mandatario estadounidense coincidieron en la necesidad de combatir el terrorismo, aunque mantienen algunas diferencias.
"Algunos asuntos siguen abiertos, como el clima y el comercio. Y no estoy 100% seguro de que hoy podamos decir _ el sr. presidente y yo _ que tenemos una posición común, una opinión común sobre Rusia”, declaró Tusk agregando que hay que encontrar unidad en torno a valores como la libertad, los derechos humanos y la dignidad.
"La gran tarea hoy es la consolidación de todo el mundo libre en torno a estos valores”, manifestó.
Más tarde en el día, está previsto que Trump asista a su primera cumbre de la OTAN, una alianza forjada hace décadas que es una pieza clave de la seguridad en Occidente, pero que se ha visto sacudida por el recelo del mandatario a cumplir sus compromisos.
El dirigente amenazó con retirarse del pacto porque cree que otros países miembro no pagan una cuota justa. Por el momento también se ha negado a comprometerse con el Artículo 5, por el que cada nación socia se compromete a defender a las demás.
Pero las capitales europeas sacudidas por la indecisión de Trump podrían encontrar pronto cierta seguridad. El presidente estadounidense cambió recientemente de postura y alabó la necesidad de la OTAN, mientras el secretario de Estado, Rex Tillerson, dijo el miércoles que “por supuesto” Washington respalda el Artículo 5, aunque el republicano sigue queriendo que otros países cumplan su obligación de destinar el 2% de su Producto Interno Bruto en defensa.
"Creo que se puede esperar que el presidente sea muy duro con ellos, diciendo: 'Miren a Estados Unidos gastando el 4%. Estamos haciendo mucho'", declaró Tillerson a reporteros a bordo del Air Force One. El secretario de Estado dijo además que la OTAN daría “un paso muy importante” a entrar en la coalición internacional que lucha contra el grupo EI.
El secretario general de la alianza, Jens Stoltenberg, anunció el jueves que la OTAN entrará en la coalición aunque no participará en operaciones de combate.
Las 28 naciones que conforman la OTAN, a las que pronto se unirá Montenegro, renovarán la vieja promesa de avanzar hacia el objetivo de destinar un 2% de su Producto Interno Bruto a defensa para 2024.
Durante su estancia en Bélgica, Trump inaugurará un monumento de recuerdo a los ataques del 11 de septiembre de 2001, la primera y única vez que la OTAN activó la cláusula de defensa colectiva, el Artículo 5. Además ofrecerá un discurso en la flamante nueva sede de la alianza, valorada en 1.200 millones de dólares.