Desestimando preocupaciones sobre la inestabilidad económica mundial, el Primer Mandatario estadounidense defendió el lunes su forma de presionar a China para lograr un acuerdo comercial diciendo que es un estilo que le funcionó cuando era empresario.
Trump fue cuestionado por su estilo de negociación mediante el cual elogia al presidente chino Xi Jinping un día y lo critica al día siguiente. Los aliados de Estados Unidos dicen que eso está creando problemas de inestabilidad para ellos y otros países, dijo un periodista en la conferencia de prensa al cierre de la participación de Trump en la cumbre del Grupo de los Siete.
“Lo siento, es mi manera de negociar”, respondió el mandatario.
El gobernante dijo que las imposiciones de aranceles estadounidenses a productos chinos han afectado tan fuertemente a China que el país asiático no tendrá otra alternativa que llegar a un acuerdo con Estados Unidos.
A la guerra comercial de Trump con China se le atribuye la desaceleración económica mundial y algunos expertos temen que haya una recesión económica en Estados Unidos. Algunos de los líderes que se reunieron en la pintoresca ciudad de Biarritz, Francia, exhortaron a Trump a poner fin al enfrentamiento.
El presidente Emmanuel Macron, anfitrión de la cumbre que acompañó a Trump en la conferencia de prensa, dijo que la situación ha creado incertidumbre económica e instó a ambas partes a llegar a un acuerdo.
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