El gobierno de Irán criticó otra vez el jueves las sanciones de Estados Unidos en su contra que catalogó de "inaceptables", mientras que el presidente estadounidense Donald Trump ha descartado que existan desacuerdos en su gobierno y ha dicho que Irán querrá hablar pronto.
Diarios estadounidenses como The New York Times han sugerido que hay conflictos dentro de la Casa Blanca respecto al tema iraní.
"Se expresan diferentes opiniones y tomo una decisión decisiva y final", escribió Trump en su cuenta de Twitter. "Todos los lados, puntos de vista y políticas están cubiertos", agregó.
De hecho, el canciller iraní, Mohammad Zarif, dijo el jueves en Japón que su gobierno está comprometido con un acuerdo nuclear internacional que se está debilitando entre crecientes tensiones en Oriente Medio.
Defendió el derecho de su país a retirarse del acuerdo, tal como lo hizo EE.UU. hace un año.También defendió su derecho a responder a las sanciones estadounidenses.
"Creemos que la escalada por parte de Estados Unidos es inaceptable e injustificada. Hemos aplicado una moderación extrema", indicó.
La agencia Mehr citó al funcionario diciendo que "no se puede tratar de forma unilateral un acuerdo multilateral".
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Las tensiones en la región crecieron después de acusaciones de sabotaje contra varios petroleros en la costa de Emiratos Árabes Unidos, un ataque de dron contra un oleoducto saudí reivindicado por rebeldes hutíes aliados con Irán en Yemen y el despliegue de bombarderos y buques de guerra estadounidenses en la región.
Las tensiones entre Irán y EE.UU.
El líder supremo de Irán respondió el martes con una amenaza velada a EE.UU., indicando que a la república islámica no le costaría mucho enriquecer uranio a niveles aptos para armamento. También dijo que si bien su país no negociará con Washington, no busca una guerra.
El Departamento de Estado de Estados Unidos ordenó el miércoles que todo el personal gubernamental no imprescindible abandonara Irak, mientras que Alemania y Holanda suspendieron sus programas de asistencia militar en el país ante las nuevas tensiones.
El traslado de personal diplomático es una medida habitual en épocas de conflicto, pero no estaba claro qué había motivado la decisión de la Casa Blanca. En Irak hay poderosas milicias proiraníes, pero también más de 5.000 soldados estadounidenses. El Mando Central del Ejército estadounidense dijo que sus tropas estaban en alerta, sin entrar en detalles.
Fuentes estadounidenses dijeron la semana pasada que habían detectado indicios de preparativos iraníes para posibles ataques contra fuerzas e intereses de Estados Unidos en Oriente Medio, pero Washington no ha explicitado en qué consistiría esa amenaza.
