El primer ministro de Holanda, Mark Rutte, dijo que su país "no descansará" hasta encontrar a los responsables del siniestro del avión de Malaysian Airlines en el este de Ucrania, que dejó 298 muertos, entre ellos 192 de sus compatriotas.
Rutte agregó que hay “incertidumbres” sobre la tragedia y consideró que aparentemente el avión comercial de la aerolínea malaya que viajaba de Amsterdam a Kuala Lumpur fue derribado.
"Hay algo que está claro: si es un ataque, los autores tienen que ser encontrados y castigados. Es más, no descansaremos. Las víctimas y sus familias tienen derecho a ello", dijo.
El gobierno holandés ha exigido una investigación completa e independiente para determinar lo que llevó al avión de Malaysian Airlines a ser derribado, según su ministro de Relaciones Exteriores, Frans Timmermans.
Timmermans llegó el 18 de julio a Kiev junto a un equipo de 15 investigadores forenses para participar en la investigación del incidente, y ha pedido que se permita pleno acceso del equipo al área en que están los restos del avión según la prensa holandesa.
Rutte insistió en que "los datos van a salir a la luz durante la investigación que se va a realizar".
