La alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Federica Mogherini, expresó el martes en un comunicado su “preocupación” por la elección de Venezuela como país miembro del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
"No se puede ignorar la gravedad de las violaciones de derechos humanos en Venezuela, tal y como reflejan los hallazgos del informe” de la Alta Comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, dijo la representante.
Mogherini añadió que el consejo "tiene la responsabilidad de mantener los estándares más elevados en la promoción y protección de los derechos humanos" y pidió a los países que tienen representación en la ONU proteger la “integridad y credibilidad” del consejo.
Por su parte, el canciller del gobierno en disputa de Venezuela, Jorge Arreaza, rechazó las declaraciones de Mogherini diciendo que el puesto fue obtenido “con absoluto apego a las normas democráticas de las Naciones Unidas”.
“[El gobierno en disputa de Venezuela] invita a los países europeos a revisar sus actuaciones en la materia, en especial cuando se trata del uso excesivo de la fuerza para reprimir manifestaciones”, escribió Arreaza en un comunicado.
Venezuela fue elegida la semana pasada, junto con Brasil, al Consejo de Derechos Humanos de la ONU con 105 votos, superando a Costa Rica, quien obtuvo 96. La ONU no reconoce a Juan Guaidó como el presidente interino de Venezuela y, por lo tanto, son los representantes de Maduro quienes ocupan el puesto del país en el organismo.