Grupos violentos, conocidos como colectivos, que simpatizan con el gobierno del presidente Nicolás Maduro, irrumpieron violentamente el miércoles en el parlamento de mayoría opositora, que realizaba una sesión solemne destinada a conmemorar los 206 años de la independencia de Venezuela.
Al menos cinco diputados fueron agredidos por los colectivos que ingresaron a la sede del poder legislativo con tubos, palos, piedras y otros objetos, tras forzar uno de los portones.
Durante más de siete horas lanzaron bombas de estruendo e impidieron que más de 300 personas entre parlamentarios, periodistas, trabajadores e invitados especiales, pudieran salir del recinto.
Una vez que se produjo la evacuación, los grupos armados lanzaron piedras y continuaron amedrentando a periodistas y diputados.
El parlamentario Henry Ramos denunció que se registraron disparos con arma de fuego y que los hechos ocurrieron bajo la mirada impasible de las fuerzas del orden.
De acuerdo al diputado Tomás Guanipa, el comandante del contingente de la Guardia Nacional encargado de la protección del parlamento, Vladimir Lugo, fue quien permitió el ingreso de los violentos.
El presidente del parlamento, Julio Borges, calificó la situación como un secuestro.
“Que haya venido acá un minúsculo grupo de personas mandadas por el gobierno a secuestrar (…) la soberanía popular (…) el episodio de hoy lo pueden extrapolar a lo que va a ser la realidad si llegamos a esa Constituyente fraudulenta de Maduro, la fuerza bruta, el salvajismo, las armas, la represión, la violencia”.
Durante un desfile militar por el día de la independencia, el presidente Nicolás Maduro calificó el asedio al parlamento como hechos extraños y tras condenar la violencia pidió una investigación.
