Silencio absoluto existe en Venezuela por parte del gobierno del presidente Nicolás Maduro sobre la investigación por narcotráfico contra el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, confirmada este lunes por el diario The Wall Street Journal (WSJ).
Ni Cabello, ni ninguno de los otros cinco funcionarios investigados, civiles y militares, ha emitido opinión sobre el reporte periodístico de WSJ según el cual se les investiga “bajo la sospecha de que han convertido el país en un centro global de tráfico de cocaína y lavado de dinero, según más de una decena de personas al tanto de las indagaciones”.
Tampoco ningún líder de la oposición venezolana ha fijado posición sobre este reporte, respaldado por el testimonio de funcionarios que participan en la investigación que adelantan fiscales de Estados Unidos.
La noticia, difundida ampliamente por medios internacionales, ha sido silenciada en Venezuela por la prensa que controla el Estado y por la prensa privada que tiene afinidad con el gobierno de Maduro.
El diario El Nacional gestionó, la tarde de este lunes ante la Dirección de Prensa de la Asamblea Nacional una entrevista telefónica con Cabello para conocer su posición ante los señalamientos en su contra. La respuesta obtenida fue que debía solicitar la entrevista con un correo electrónico.
La semana pasada, a petición de Cabello, la justicia venezolana dictó prohibición de salida del país contra 22 directivos de los diarios El Nacional, Tal Cual y el portal digital La Patilla, medios a los que acusó por difamación.
El Nacional, Tal Cual y La Patilla difundieron la información publicada en enero por el diario español ABC que reveló que Cabello era investigado en EE.UU. por narcotráfico.
Cuando ABC de España publicó en enero pasado detalles de la investigación, la primera reacción de Cabello fue a través de la red social Twitter.
“Cada ataque contra mi persona fortalece mi espíritu y mi compromiso, agradezco infinitamente las muestras de solidaridad de nuestro pueblo”, escribió Cabello.
