Después de la reunión entre el secretario de Estado de EE.UU. Mike Pompeo y el presidente de Colombia Iván Duque, en la que discutieron entre otros temas la situación en Venezuela, la cancillería venezolana se pronunció en contra de la “actitud intervencionista” del diplomático estadounidense.
En un comunicado , el Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores dijo que Pompeo viajaba a Latinoamérica para “emitir órdenes directas a los gobiernos subordinados a Washington” para que éstos “escalen sus agresiones” contra Venezuela.
El ministro de Relaciones Exteriores venezolano, Jorge Arreaza, tuiteó el comunicado pidiendo a Washington y Bogotá “concentrarse en la lucha contra las industrias de la guerra y el narcotráfico en Colombia” en vez de los asuntos “internos” de Venezuela.
En una rueda de prensa después de su reunión con Duque en la ciudad costera de Cartagena, los líderes hablaron sobre “cómo colaborar con socios nacionales e internacionales para ayudar a quienes huyen de Venezuela”.
Pompeo agregó que Colombia es un país “líder en los esfuerzos regionales para apoyar la democracia y el orden de la ley” en Venezuela.
En otro comunicado, también sobre la misma reunión, la cancillería venezolana denuncia “ante la comunidad internacional” el “uso del territorio colombiano para generar una agresión contra Venezuela”.
El ministerio hace énfasis en el supuesto atentado contra el presidente Nicolás Maduro en agosto de 2018 que se hizo, según el gobierno venezolano, “con el conocimiento y el consentimiento del gobierno deTrump”.