En Venezuela, especialistas en materia petrolera ven poco probable la importación de gasolina a través de empresas privadas, tal y como lo anunció el gobierno en disputa.
Ante la paralización de sus refinerías y la incapacidad para garantizar el consumo interno de gasolina, el gobierno en disputa de Venezuela puso la propuesta sobre la mesa.
A pesar de que el ejecutivo dice que ya hay compañías interesadas en este mercado, especialistas advierten que las sanciones de Estados Unidos a funcionarios del chavismo y a la petrolera Pdvsa son un obstáculo
"Aun sin las sanciones esto sería un desastre. Con las sanciones esto se complica muchísimo más, porque, obviamente, es difícil encontrar quién venda la gasolina a un privado que tiene que presentar una serie de condiciones. Y, segundo, encontrar barcos que estén dispuestos a tomar el riesgo de venir al país, porque el problema está en que esa gasolina viene a Venezuela y el régimen que está sancionado es el de Venezuela”, indicó a la Voz de América Horacio Medina, exgerente de Petróleos de Venezuela.
La semana pasada, Estados Unidos sancionó a cuatro compañías marítimas internacionales, tres en las Islas Marshall y la otra en Grecia, que transportaron petróleo venezolano entre febrero y marzo. Por ello, el economista Luis Bárcenas señala que hay pocos vendedores de gasolina en el mundo dispuestos a hacer una transacción cuyo destino sea Venezuela.
"Si Irán es el único que ofrece petróleo a Venezuela, así sea importado por un venezolano que no forma parte del gobierno, ese privado está sujeto a sanciones, porque Irán está sancionado“, señaló a la VOA.
El otro obstáculo, según los consultados, es el precio de venta, establecido a 50 centavos de dólar por litro. Según Medina, lo mínimo que tendrá que importar cada actor para que el negocio sea rentable son 350.000 barriles.
"El empresario privado no la va a regalar y 0,50 dólares no necesariamente va a cubrir los costos de comprar la gasolina en el exterior, pagar flete, descargarlo y manejarlo. Entonces tendría que ser costo variable y flexible”, afirmó Medina.
Ambos coinciden en que, nuevamente, Nicolás Maduro tendrá que depender de importaciones directas de Irán, para poder abastecer el mercado interno.