Testimonios de las fuerzas armadas de Venezuela y del servicio de aduanas a los que tuvo acceso la Voz de América denunciaron la presunta complicidad de altos mandos militares del gobierno en disputa de Nicolás Maduro en el paso de narcóticos de Colombia a Venezuela en la frontera de Paraguachón, en la Guajira.
Imágenes recogidas por este medio revelan el ingreso de camiones a Venezuela provenientes de Colombia en medio de la oscuridad de la noche. Según un funcionario de la Guardia Nacional, cuyo nombre no podemos revelar por razones de seguridad, a través de un supuesto ingreso de importaciones de materia prima para la producción nacional, alimentos y otros productos, se camufla la entrada de droga en grandes cantidades.
“Pueden venir en gandolas o en camiones también, los pueden traer entre la comida o en las pipas vacías de la gasolina”, aseguró la fuente a Venezuela 360.
De acuerdo con los mismos testimonios, la actividad delictiva arrancaría poco antes de la medianoche, con el ingreso de camiones cargados de narcóticos que llegan a Paraguachón, a la espera de ingresar la mercancía hacia Venezuela.
“Sabes que aquí no hay nada oculto y aquí se sabe que se maneja en esas gandolas, porque hay momentos que ha tocado abrirlas por cualquier cuestión y hay narcóticos, pero como ya eso viene con orden de un general, de algunos jefes del gobierno, de ministros que vienen ya con su nombre, pues no pasa nada. ¿Qué puede pasar? Y el que llegue a hablar ya sabemos lo que le puede pasar”, relató un funcionario de aduanas a la Voz de América, también bajo condición de anonimato.
A cinco kilómetros del paso fronterizo, en Guarero, se ubica el edificio de aduanas donde los funcionarios civiles aguardan la llegada de los vehículos para legalizar las mercancías y permitir que los camiones prosigan su ruta en el interior del país.
Según el testimonio de un trabajador, los uniformados recibirían órdenes para no someter a ciertos camiones a inspección y hacerles entrega de un salvoconducto.
“Si son veinte, revisamos cinco o seis, las otras nos dicen que no pueden ser revisadas, pero le hacemos el papeleo de salida, el manifiesto de lo que sale de cada gandola, al igual que con las otras”, dijo la fuente sobre el funcionamiento del entramado delictivo.
Con la mercancía ilícita ya en el país, los vehículos serían escoltados por las fuerzas militares y de inteligencia hasta Maracaibo, donde la droga sería distribuida hasta los diferentes puertos y aeropuertos del Zulia.
Expertos antidrogas consultados por la VOA aseguran, que los traficantes, controlan el corredor completo desde la frontera colombo-venezolana hasta los lugares en los que se desapachan los narcóticos hacia centroamérica y Estados Unidos.
Según Michael Virgil, Exjefe de Operativos Internacionales de la DEA, “los grupos organizados, como el Cartel de los Soles, en Venezuela, no usan simplente una ruta, un transporte principal. Siempre usan naves y buques, y de Venezuela esos cargamentos van a Honduras, Centroamérica, pasan por diferentes islas en el Caribe, y luego de allí a Estados Unidos”.
Con el objetivo de reforzar sus operaciones antinarcóticos en la zona, el 1 de abril de 2020, después de presentar cargos por narcotráfico contra Nicolás Maduro, la administración Trump anunció el envío de buques de la Armada hacia Venezuela, el mayor despliegue militar en el Caribe en décadas.
“Si no hay inteligencia esos recursos van a ser inútiles. Entonces nosotros necesitamos colaborar con diferentes agencias aquí en Estados Unidos y luego también con Colombia y otros países en América del Sur y el Caribe para poder disminuir el tráfico de droga que está saliendo de Venezuela”, dijo Michael Virgil a la Voz de América.
Según fuentes militares de Colombia, en la Guajira Venezolana los cárteles mexicanos ejercen influencia en las localidades de Cojoro, Aipiapa y Castillete a orillas del Golfo, donde aeronaves y hasta submarinos han sido abandonados. Muestra, ello, del poder logístico de un entramado delictivo que operaría a sus anchas con la complicidad de altos mandos militares venezolanos.
“Hay militares que tienen conocimiento de eso, pero son militares de alto grado no son los subalternos, los nuevos no tenemos nada que ver con esos, son de coroneles para arriba”, reveló otro integrante de las fuerzas armadas del país a este medio informativo.