Se calcula que más de 11 mil migrantes haitianos, cubanos, africanos y venezolanos están atrapados en Necoclí, un municipio colombiano, fronterizo con Panamá. La única empresa de transporte marítimo del lugar no se da abasto para prestarles el servicio a todos, llevarlos a otro lugar para que puedan continuar su camino. Mientras tanto, estas personas esperan en improvisados campamentos a orillas de las playas del golfo de Urabá. Nuestro enviado especial, Jair Díaz nos explica la situación de lo que allí se vive.