El segundo de un grupo de tres tanqueros iraníes ingresó el miércoles a aguas venezolanas con combustible para el país sudamericano, que lucha con una colapsada industria petrolera y sanciones de Estados Unidos que han paralizado sus importaciones y exportaciones.
El buque con bandera iraní Fortune llegó a la zona económica exclusiva de Venezuela a las 0545 GMT, siguiendo la misma ruta que el Forest, que atracó en el puerto de El Palito el lunes para descargar combustible, según fuentes y datos de seguimiento de barcos de Refinitiv Eikon.
Se espera la llegada del tercer tanquero de la flotilla, el Faxon, a finales de esta semana, para completar la entrega de unos 820.000 barriles de gasolina y otros combustibles a la petrolera estatal PDVSA, según los datos, que mostraron que los barcos han cruzado el Océano Atlántico sin ninguna perturbación.
La estatal PDVSA y el Ministerio de Petróleo de Venezuela no respondieron a solicitudes de comentarios.
Venezuela e Irán, ambos bajo sanciones de Estados Unidos que han impactado sus industrias petroleras, han fortalecido la colaboración este año impulsando el comercio bilateral que hasta ahora ha incluido crudo, condensados, combustible, equipos para refinerías, oro y alimentos.
El combustible iraní se necesita desesperadamente en el país sudamericano, donde largas filas de conductores esperan gasolina frente a las estaciones de servicio, ya que la producción de las refinerías de PDVSA sigue siendo insuficiente para satisfacer la demanda.
También han crecido las protestas en poblados y caseríos por la falta de gasolina y servicios básicos como agua, electricidad y gas para cocinar que se han extendido por meses, según organizaciones que monitorizan el conflicto social en Venezuela.