Con un proceso de vacunación lento y sin un plan general, Venezuela comenzó una jornada de vacunación a adultos mayores seleccionados a través del “Carnet de la Patria”, un programa del gobierno del presidente Nicolás Maduro para distribuir ayudas sociales, que ha sido altamente politizado.
“Tuve la suerte que salí escogido entre los primeros”, dijo uno de los vacunados a la Voz de América, aún tembloroso.
“Mi esposo no salió en esta jornada, tengo esperanza que en la próxima”, comentó Josefina Castillo, de 66 años, que recibió la vacuna Sputnik-V el sábado en Caracas.
“Ah no estás incorporado, incorporate”, dijo Georgette Topalián, dirigente del gobierno de Nicolás Maduro, que lideró la jornada de vacunación, de solo 500 dosis de la vacuna.
Venezuela atraviesa una segunda ola del virus, que las autoridades califican de “más virulenta” y que vinculan a dos variantes brasileñas, y suma 1.759 muertes, y 172.400 casos, según reportes del gobierno del presidente Nicolás Maduro, que oenegés han cuestionado por considerar que existe un elevado subregistro, por falta de pruebas.