Virgin America, la aerolínea que en seis años no había registrado ganancias, se hizo pública este viernes de manera exitosa.
El precio inicial de sus acciones era de $23 dólares, pero al mediodía había saltado un 30%, a $29.74.
El promedio en un primer día de transacciones es de 13% de ganancias.
La empresa, que cuenta con el multimillonario británico Richard Branson entre sus accionistas minoritarios, comenzó a volar en 2007, ofreciendo comodidades y buen servicio lo cual siempre ha agradado a sus clientes.
El mayor problema hasta ahora ha sido simplemente que, debido a la fiera competencia de otras aerolíneas más grandes que ofrecen más vuelos y más rutas, la compañía nunca ha podido salir del saldo rojo, hasta el año pasado que registró una ganancia de $13 millones de dólares.
Sus ganancias en el tercer trimestre de este año han alcanzado los $41,6 millones de dólares.
El momento para lanzarse a la bolsa ha sido el más propicio. No solo el precio del combustible –uno de los gastos mayores– ha disminuido considerablemente, sino que la bolsa ha tomado impulso en las últimas semanas y alcanzado niveles récord en su actividad.