Las familias estadounidenses que tratan de mantenerse como dueñas de sus viviendas podrían recibir más ayuda pronto.
Funcionarios del Departamento del Tesoro anunciarán
un plan para reducir los pagos a las familias con dos hipotecas.
Durante la burbuja hipotecaria estadounidense,
muchas familias, algunas con mal crédito, pudieron adquirir viviendas gracias a
una segunda hipoteca, lo que les permitió hacer pagos menores y evitar multas.
Estas segundas hipotecas frecuentemente tenían
intereses más altos, y cuando la economía comenzó a empeorar, muchas familias
no pudieron seguir pagando.
Las autoridades dieron a conocer que el nuevo programa
pagará a las empresas prestamistas para que modifiquen los préstamos con el
objeto de que menos familias pierdan sus viviendas.
Un informe divulgado este mes resaltó que el número de familias estadounidenses en peligro de perder sus viviendas se disparó 24% durante los primeros tres meses de 2009 en comparación con el mismo período en 2008.