Los mercados globales declinaron en las operaciones bursátiles del lunes, tras el nerviosismo de las bolsas la semana pasada.
En Nueva York, el promedio industrial Dow Jones retrocedió 0,7 por ciento, el NASDAQ bajó cerca de 1,3 por ciento y el S&P 500 perdió 0,8 por ciento. Este último índice perdió un total de 6,3 por ciento en agosto, siendo su peor mes desde mayo de 2012.
En Europa, el DAX de Alemania cayó 1,3 por ciento y el CAC 40 en Francia perdió medio punto porcentual. El FTSE 100 estuvo cerrado por un feriado público.
En Asia, el índice Nikkei de Japón retrocedió 1,3 por ciento. En Shanghai, donde un periodista se atribuyó en la televisión estatal la responsabilidad por la caída del mercado de valores a causa de sus artículos, el índice cerró con pérdida de 0,8 por ciento.
El diario inglés The Guardian, apunta que pese a la volatilidad de los mercados, los datos económicos de Estados Unidos han sido ampliamente positivos en los últimos días.
La semana pasada, recuerda el diario, el Departamento de Comercio informó que la economía estadounidense creció a una tasa anual de 3,7 por ciento en el segundo trimestre, superando los pronósticos.
El bajo precio del petróleo y la recuperación del mercado inmobiliario junto con el crecimiento del empleo han contribuido a un mayor gasto del consumidor.
