Autoridades mexicanas desarticularon un red de traficantes de niños, que habría vendido -por más de un millón de dólares- a unos 100 menores latinos en los Estados Unidos en el último año.
La policía arrestó ayer a tres cabecillas de la organización. Dos mujeres que fueron tomadas en custodia en el aeropuerto internacional de Tijuana, cerca de la frontera con Estados Unidos, y que tenían consigo seis niños.
Los investigadores dijeron que las mujeres despertaron las sospechas después que reservaron los vuelos de vuelta a Ciudad de México sin los menores de edad.
Después de interrogar a las mujeres, las autoridades buscaron una vivienda a las afueras de Ciudad de México y arrestaron al marido de una de ellas. Los oficiales de policía también encontraron por lo menos a cinco niños salvadoreños, que vivían allí, bajo lo que llamaron "condiciones deplorables".
La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de los Estados Unidos y autoridades del Salvador están atendiendo el caso.