Aviones estadounidenses llevaron a cabo hoy más bombardeos contra bastiones de al-Qaida y del Talibán, en el este de Afganistán.
Los más recientes ataques tienen lugar después que soldados estadounidenses y tropas aliadas afganas combatieron ayer para desalojar a los combatientes al-Qaida y del Talibán atrincherados en las montañas de la provincia Patkia en la frontera con Paquistán.
El Pentágono dió a conocer que por lo menos ocho soldados estadounidenses han perecido y que unos 40 han resultado heridos desde que la Operación Anaconda comenzó el viernes.
El General Tommy Franks, comandante de las operaciones en Afganistán, dijo que unos 200 combatientes al-Qaida y del Talibán han sido eliminados, mientras que otros fueron capturados y están siendo interrogados.